miércoles, 17 de febrero de 2010

the kookaburras/ los cucaburras - mary oliver


"In every heart there is a coward and a procastinator.
In every heart there is a god of flowers just waiting
to come out of its cloud and lifts its wings.
The kookaburras, the kingfishers, pressed against the edge
of thier cage, they asked me to open the door.
Years later I wake in the night and remember how I said to them
no, and walked away.
They had the brown eyes of soft-hearted dogs.
They didn't want to do anything so extraordinary, only to fly
home to their river.
By now I supposed the great darkness has covered them.
As for myself, I am not yet a god of even the palest flowers.
Nothing else has changed either.
Someone tosses their white bones to the dung-heap.
The sun shines on the latch of their cage.
I lie in the dark, my heart pounding."

* * *

"En cada corazón hay un cobarde, un indeciso.
En cada corazón hay un dios de las flores esperando el momento justo
para asomar de su nube y levantar las alas.
Los cucaburras y martín pescadores, aprisionados contra el filo
de su jaula, me pedían que les abra la puerta.
Años después me despierto en medio de la noche y recuerdo cómo les dije
no, alejándome.
Tenían los ojos marrones, como esos perros de corazón tierno.
No pretendían hacer nada extraordinario, sólo volar
hacia su casa, hacia su río.
Al día de hoy imagino la gran oscuridad cubriéndolos.
En cuanto a mí, no soy ni siquiera el dios de las flores más pálidas.
Nada ha cambiado demasiado.
Alguien sacude sus huesos blancos en el estiércol.
El sol se refleja sobre la puerta de su jaula.
Me tiendo en lo oscuro, mi corazón dolido."

Mary Oliver, House of light, Beacon Press, Boston, 1992.
Traducción: paula aramburu

No hay comentarios:

Publicar un comentario